miércoles, 22 de abril de 2015

Día de la poesía y del libro



Mañana es el día del libro y en la guarde lo hemos celebrado a nuestra manera. En primer lugar, he rescatado una actividad que tenía preparada para el día mundial de la poesía, el 21 de marzo, pero en aquel momento no fue posible realizar.
Para celebrar ese día, había decidido regalar a cada uno de mis peques un verso, un pequeño pareado de rima asonante. El verso tenía que tener su nombre, y para que lo sintiesen como algo propio y personal, tenía que hacer referencia a alguna característica del niño en ese momento. Después de observarles unos días, esto fue lo que salió:


- A Lucía le gusta escuchar el Ave María. Es cierto, cada día cuando hacemos relajación pide  escuchar el Ave María de Shuber. 


Marcos y los zancos

- Marcos, quiere aprender a andar con zancos. Esos días lo intentaba con mucho interés, pues le había visto a su hermano como los maneja.

- Samira, delante del espejo se mira y remira. ¿Tendrá algo que ver la profesión de su mamá? 

- A Ángel le encanta pintar, saltar, correr, cantar y bailar. Este chico es una polvorilla, pero tiene un sentido del ritmo increíble. 

- Valeria, cuando está malita se pone muy seria. Bueno, yo creo que a todos nos pasa, solo que ella últimamente no levanta cabeza...

- Manuela, coge un muñeco y lo envuelve en un trapo de tela. Y le da de comer, y le acuesta, y le pasea...

- Jorge, camina como un oso grande y torpe. Ahora está en esa fase que se conoce como "la marcha del oso".

- Teresa, una cubanita que ahora es leonesa.


Así que hoy imprimí los versos, los pegué en cartulinas de colores, los plastifiqué y se los regalé. Este fue el resultado:


Observando nuestros  versos...


Cuando leí su verso a cada uno de los peques, los mayores pedían que se lo repitiera una y otra vez, y otra vez. ¡Qué tendrá el nombre propio, que cuando lo nombro, lo sienten de una forma tan especial!

Y la reacción de Ángel me encantó. Cada vez que se lo leía se ponía a saltar, correr y bailar, y a reírse con unas carcajadas tan contagiosas que terminaba por reírme yo. Y me decía, "happy, happy" . ¡De verdad, que hacía tiempo que no le veía tan contento! Las tarjetas las dejamos colocadas en la pared y cada poco se acercaban y las observaban, no sé qué querrían comprobar…


La segunda actividad consistió en la presentación de Don Quijote a los niños. En esta fecha, es tradicional realizar lecturas colectivas del Quijote en las Bibliotecas públicas de muchas ciudades, y como la tecnología está presente en todos los ámbitos, la última iniciativa al respecto ha sido una lectura colectiva a través del canal Youtube. 



Este es Don Quijote
Nosotros hemos sido un poco más modestos, les he leído, más bien narrado, el capítulo en el que D. Quijote ataca a un rebaño de ovejas y después es apaleado por los pastores, porque me pareció el más sencillo de entender para los peques.


Nos hemos detenido reconociendo las características del personaje: es un señor viejo, tiene bigote y barba blancos, usa una armadura, un escudo y una lanza (como Pupi, me ha dicho Marcos), tiene un caballo blanco y un “amigo” que se llama Sancho Panza.

Después hemos observado las ilustraciones del libro, (donde lo que más les ha llamado la atención era un Quijote sangrando por la nariz, "tiene pupa", me  decían). Y finalmente hemos dramatizado unos quijotes muy rudimentarios, armados con una pica-lanza y un escudo-tapadera y cantando la cancioncilla que os envié por whatsApp.

Naturalmente, hemos correteado un buen rato por la clase, cabalgando a lomos de imaginarios rocines…¡menuda quijotes estamos hechos!

La pica-lanza y el escudo-tapadera



Lucía Antolín

No hay comentarios:

Publicar un comentario